Introducción.
Últimamente es muy
habitual que cuando llega cualquier festividad niños y adultos festejen quemando fuegos
artificiales, sin embargo, éste o cualquier otro producto fabricado a base de
pólvora puede provocar accidentes y quemaduras. Los fuegos artificiales pueden causar lesiones
severas y diversas ya que depende de la zona afectada, a mayoría de estas
lesiones involucraron a los ojos, oídos, manos, y piernas.
Los fuegos
artificiales tienen la capacidad de matar a gente que los enciende y también
incluso a los espectadores que solamente los ven. Algunas lesiones comunes que las personas
pueden sufrir por los fuegos artificiales son las siguientes:
- Pérdida de extremidades, incluyendo manos, antebrazos, pies y dedos de las manos y pies
- Huesos rotos y ligamentos desgarrados
- Quemaduras de primer, segundo, y tercer grados
- Visión afectada o ceguera permanente
- Cicatrización permanente
Por definición una
quemadura es un daño a los tejidos como resultado de una exposición al fuego,
líquidos calientes, contacto con objetos calientes, cáusticos o ácidos, radiación
o contacto con una corriente eléctrica.
Las quemaduras por
explosivos al igual que otras se pueden clasificar así:
- 1º grado: piel roja e hipersensible. Historia de exposición momentánea. Se asemeja a la quemadura solar. Curación en más o menos 1 semana.
- 2º grado: piel roja con ampollas, edematosa, húmeda con exudado seroso. Dolor extremo, sensibles a cambios de aire o temperatura. Exposición a temperaturas entre 40-55ºC con curación entre 14 y 21 días. Alta probabilidad de cicatrices hipertróficas.
- 3º grado: de apariencia blanquecina, chamuscada, morena, secas, se palpan como cuero. Exposición de larga duración a altas temperaturas. Necesitará injertos de piel.
- 4º grado: Lesiones a tejidos profundos como músculos, huesos y tendones. Aspecto esqueletónico, carbonizada. Requieren amputación o fasciotomìa.